Famosos abandonan las redes sociales: nueva víctima Dua Lipa
La cantante Dua Lipa ha sido una de las protagonistas de 2020. Fue de las pocas artistas que se arriesgó a lanzar un nuevo disco en medio de los meses más duros de confinamiento y este atrevimiento consiguió que recibiera las mejores reseñas por un trabajo, Future Nostalgia en el que ha conseguido colaborar con artistas de la talla de Maddona o Kylie Minogue. Además, su relación con Anwar y sus últimas actuaciones en diferentes programas de televisión –vestida de pies a cabeza con diseños de Valentino han hecho que su proyección se haya visto disparada exponencialmente en los últimos meses. Sus seguidores en Instagram suman más de 54 millones y tal exposición es algo que parece no gustar del todo a la cantante, quien habría delegado el manejo de sus redes en un equipo profesional.
No es la primera artista que decide dejar en manos de profesionales el uso de sus redes, pero sí la primera que ha hablado de una manera abierta acerca de ello. En declaraciones ha admitido que no lleva bien esta parte de su profesión: “Me provocaba ansiedad. Pensé que no era la manera en la que tenía que experimentar este momento que solo se va a dar una vez en la vida. Alteraba mi confianza y causaba que estuviera nerviosa pensando qué diría cualquiera”. Una publicación de la artista durante el verano –con la que la kosovar se posicionaba en el conflicto que su país de origen mantiene con Albania– provocó una de sus más sonadas polémicas por culpa del uso de sus redes sociales.
Parece poco probable que ninguno de los perfiles de Dua Lipa muestren ninguna postura política ahora que su popularidad se ha multiplicado y su manejo está en manos de un equipo de comunicación. “Cuando hacía mis primeras entrevistas y me preguntaban acerca de cómo bregaba con el odio no sabía de qué estaban hablando. Era muy temprano en mi carrera y la gente no se dedicaba a decir algo que me pudiera ofender”, reconocía la cantante en la conversación.
No es la primera ocasión en la que Dua Lipa admite no llevar demasiado bien las consecuencias que se derivan del uso intensivo de las redes sociales. En marzo de 2020 abandonaba del todo su cuenta de Twitter que ahora solo se utiliza como herramienta de promoción de nuevos proyectos entre sus seguidores. En declaraciones a la revista Attitude, la cantante admitía el pasado mes de noviembre que el peor momento llegó tras la publicación de su primer disco: “Experimenté una enorme cantidad de bullying tras la salida de mi primer álbum y es algo que me provocó ansiedad, me enfadó y me hizo pensar que igual no era tan buena en lo que estaba intentando hacer”.
Otras estrellas mediáticas, como Selena Gómez han abogado en los últimos meses por promover un uso saludable de las redes sociales después de haberse convertido en el objetivo de los trolls que las habitan. La actriz texana dejó sus perfiles durante algunos meses del 2020 y fue sonada su desaparición online de 2018, cuando habló abiertamente de lo mal que llevaba algunas conductas de sus seguidores, lo que le había llevado a tomar tan drástica determinación.
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